En este post me hago eco de algunas noticias recientes de las que hay que leer varias veces para dar por ciertas.
La primera de estas noticias nos lleva a Eagle Point en Oregon (Estados Unidos) donde las autoridades se han hecho propietarias del agua de lluvia. Así, tal cual. El agua de lluvia tiene dueño. Buena fe de ello puede dar Gary Harrington, ciudadano de esta localidad, condenado a 30 días de prisión por almacenar agua de lluvia en tres bidones.
Según la ley en los estados de Colorado, Utah y Washington es ilegal que un ciudadano recoja agua de lluvia. La legislación vigente en Oregon dice que el agua es una propiedad pública y que si algún ciudadano pretende recoger y almacenar agua de lluvia tiene que solicitarlo a la administración.
El caso es que este ciudadano, tras negarse a vaciar los tres bidones de agua y tras una batalla legal de años deberá pasar por prisión 30 días...Lo dicho, de risa. (Fuente noticia: abc.es).
Y si la noticia de que puedes ir a prisión por recoger agua de lluvia es sorprendente, la propuesta de la patronal de la industria conservera en España se puede calificar de indignante.
Anfaco (Asociación Nacional de Fabricantes de Conservas de Pescados y Mariscos) quiere que parte del salario de los trabajadores se pueda pagar en especie, es decir, con latas de conserva. De esta manera, un trabajador podría percibir el 70% de su nómina de manera normal (es decir, en dinerito) y el resto en latas de atún, sardinas...
Naturalmente, los sindicatos y asociaciones de trabajadores rechazan de plano la propuesta que finalmente fue retirada.
Puedes leer más sobre esta noticia en estos enlaces de infolibre.es o estanislaoberruezogarcia.com.
Dos noticias dignas de aparecer en el Mundo Today pero que tristemente, son absolutamente reales.
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